Traigo al blog mis tres últimas colaboraciones con la revista cultural
Agitadoras.
Fragmento: “Sabe que tengo algunos libros de poesía publicados (quién no
los tiene hoy en día) y le gustaría conocer mi opinión. Algún comentario previo
me pone en alerta, pero estoy acorralado. No me queda más remedio que aceptar.
Leo su poema. Al primer verso, pienso: mierda. Al segundo: ídem. Y así”.
Fragmento: “Pese a ser sábado, pongo el despertador a las ocho. Procuro no
hacer ruido al salir de la cama. El silencio de la casa me conduce frente al
ordenador. Antes, sin embargo, paro en la cocina para proveerme de la cafeína
necesaria. Ya lo dijo Brodsky: ningún siglo podrá arreglárselas sin jazz
ni cafeína”.
Fragmento: “Todos los poetas varones nacidos entre 1940 y 1980 han querido
follarse a Alejandra Pizarnik. Y a Anne Sexton. Y a Sylvia Plath. Pero tuvieron
que conformarse con escribirles un poema. Poesía como sucedáneo del sexo, acto
de necrofilia y vanidad”.