martes, 8 de julio de 2014

Crónica mundialista (4)

Luis Tosar podría hacer de Carlos Velasco Carballo en otra película con secuestro que transcurre en Colombia. Se tienen un aire, no lo negarán. Podría titularse, la película, Árbitro español: ¡hijo de la gran puta madre que te parió! Largo pero contundente. Lo más destacable de este Mundial (uno de los mejores de la historia, según los entendidos) lo encontramos en los diferentes titulares de prensa. Uno que también serviría como título de película es el que nos regaló el diario Correo Braziliense: El dolor que silenció nuestra alegría. Barajo dos nombres para dirigir este drama: Isabel Coixet y Ronaldo Luís Nazário de Lima (para abreviar: el verdadero Ronaldo, en palabras del siempre entrañable José Mourinho). La banda sonora ideal sería el “No me lastimes”, de la argentina Marcela Morelo. Y de esta forma magistral y sutil, más propia del ‘HOY Diario del Magdalena’, doy paso a otro de los semifinalistas, el cual también perdió una de sus bazas ofensivas más importantes. Aquí debo aclarar mi parcialidad. Mi esposa, natural de Tucumán, mira lo que escribo por encima de mi hombro. Felicidad conyugal aparte, el titular que nos regaló Javier Mascherano bien merece un Mundial: “Estoy harto de comer mierda”. Dicen que con esta frase logró lo que Courtois no pudo (y mira que esta temporada le puso empeño): hacer llorar a Messi. De Holanda diré que el papel de eterno aspirante empieza a sentarle bien. ¿Y de los alemanes, qué decir de nuestra madre patria? Que su regularidad aburre. Son al fútbol lo que Indurain fue al ciclismo.

Javier Alejandro Mascherano