sábado, 27 de agosto de 2016

Unos días de agosto (fragmentos de un diario)

martes, 16 de agosto de 2016

Un agosto de relatos: de un lado, los de Koundara, escritos por David Pérez Vega, de otro, los de De qué nos enamoramos, de Roman Simić. Los primeros, como escribió David en la dedicatoria del ejemplar que tengo en casa, son "cuentos realistas de corte norteamericano". En ellos, desfilan jóvenes a punto de abandonar la juventud, inmersos en trabajos precarios que difícilmente los colmarán, asfixiados por la falta de oportunidades de mejora, por el turbio futuro que se cierne sobre ellos... Creo que fue Bauman quien dijo que, por primera vez en la historia reciente, los jóvenes de hoy no tenían verdaderas expectativas de superar el nivel de vida alcanzado por sus padres. De eso van estos relatos (más bien: este es el marco en el que se mueven los personajes de estos relatos). Respecto al libro de Simić, se trata de un realismo menos descriptivo, más evocador, igualmente eficaz. De la España en crisis, a la Croacia de posguerra... Por cierto, compré Koundara a través de la tienda on line de Baile del Sol. Al abrir el paquete que lo contenía, me encontré con la grata sorpresa de De qué nos enamoramos. Bien por ellos.


jueves, 18 de agosto de 2016

Rim Jong-Sim, la gimnasta norcoreana ganadora de un oro en los actuales Juegos de Rio: “Lo primero en lo que pensé cuando supe que había ganado es que había hecho feliz a nuestro amado líder". Es leer “amado líder” y pensar en el Gorrión Supremo de Juego de Tronos. Acto seguido, acude a mi mente aquel poema de Nicanor Parra en el que asegura que el futuro será comunista y cristiano o no será. Pienso en la contradicción que esconden estos cultos personalistas, en la cantidad de odio y fe de que estamos hechos los humanos. O adoramos el individualismo o adoramos la sumisión. ¿De verdad? El individualismo también precisa de amados líderes fuertes. Mira a tu alrededor. Paulatinamente, nos vamos convirtiendo en fanáticos y devotos. La corrupción de los Lannister frente al puritanismo proselitista de la Fe de los Siete. PP y Podemos. Trump y Clinton. Defensores del toreo y antitaurinos. Etc. Los extremos se distancian, se refuerzan en sus posiciones. La devoción acrítica frente al cinismo (o devoción al dinero). ¿Quién será nuestro Jon Nieve, nuestra Daenerys Targaryen? ¿Un nuevo amado líder? El sol nos ciega mientras la noche se aproxima… Y ya saben lo que dicen de la noche: que es oscura y alberga cosas terribles.


lunes, 22 de agosto de 2016

“Si a todo esto lo quieren llamar arte, subrayemos que es arte efímero. Todo es fugaz en el Dallol, como corresponde a la extraordinaria geodinámica de la zona. Todo es cambiante. Las zonas que ayer estaban tranquilas hoy tienen una inquietante actividad. Las fumarolas que ayer humeaban al oeste hoy lo hacen al este. Las flores de sal que lucían blancas hoy están amarillas, y pasado mañana, rojas. Y desaparecerán para germinar en otros lugares”. Ha sido leer esto (en El País) y recordar Solaris, de Stalislaw Lem.


viernes, 26 de agosto de 2016

Leo los diarios de Piglia. Me resultan muy estimulantes. Descubro que últimamente, como lector (y también como escritor), me siento atraído por dos vertientes de la literatura: de un lado, la que podría englobarse dentro de la llamada autoficción, en la que se incluirían (incluiría yo) los diarios; de otro, esa ficción extraña (recuerda: novelas breves y enigmáticas) que trata de escapar de los terrenos trillados (muchas veces adoptando las formas de la búsqueda, del misterio) y que en ocasiones tiende a lo absurdo o inexplicable (pero de manera contenida). ¿Ejemplos en mi producción? Mi Berghof particular (autoficción diarística) y Oslo (breve y enigmática). ¿Ejemplos en la producción de otros (lecturas recientes)? Dentro de la primera categoría: Burdeos, de Levrero, y Los diarios de Emilio Renzi. Años de formación, de Piglia. De la segunda: La reina de las nieves, de Gandolfo, y El cielo que nos tienes prometido, de Guillermo Aguirre.